Los cambios y transformaciones que están sucediendo por Luis Miguel Beristain para Vesta

Para México, la pregunta clave es cómo capitalizar la nueva oferta de tecnologías y servicios que lideran la transformación digital de manufactura encaminada a consolidar una nueva plataforma industrial para el mundo. La discusión no debe limitarse al desarrollo de productos inteligentes, equipos inteligentes o fábricas inteligentes. 

Más allá de lo evidente, el reto es cómo aprovechar la disrupción para asumir el liderazgo en la organización de los clústeres 4.0 para responder con eficacia a los desafíos industriales al integrar la facilitación de cadenas de valor globales, de impulso a la coordinación sin fronteras, de fomento a las inversiones interregionales y de aceleración de las capacidades y destrezas humanas necesarias.

Sin desestimar los diferentes elementos indispensables para el desarrollo de las capacidades industriales de una región, particular relevancia adquieren las instalaciones y los edificios inteligentes en los años por venir. La debida integración de todos ellos es la base para la atracción, creación y renovación de empresas de la cuarta revolución industrial. 

El Internet de Todo, el creciente interés en el consumo de energía, en la conservación de energía y la huella ecológica son nuevas demandas que se suman a los requerimientos de instalaciones especializadas como el suministro de energía, aire comprimido, torres de enfriamiento, controles de temperatura o de polvo en el aire, por mencionar algunos.